20.10.11

Inspector.
Imaginate una ratonera, imaginate una habitación donde el suelo está revestido solo de eso donde las paredes es un vacío incoloro.
El dolor te dejó inconciente, porque el cuerpo no es tarado. Cuando supera el límite de tolerancia se pone en estado metapódico cosa que siga laburando pero sin que lo notes.
Es un trampolín al estado neutro, ese donde el cuerpo no existe.
El problema está en que vos te diste cuenta de esto, asi que el también lo sabe y te convoca a una repitición infinita.
Como Prometeo con su hígado.