24.4.10

El transcurso natural de las cosas.
Otro día que ando ganas, pero decido no hacer. No vaya a ser que interfiera con el transcurso natural de las cosas.
Entonces surge y la veo emerger aunque ¿cómo, si es invisible? 
¡ajá! - digo - por mi perspicacia.
En primer lugar por saber antes que mí cómo se escribe y segundo por darme cuenta que puedo ver tus (sus) ojos. A todo esto un día gris y fresco. Ideal para lazañas.
Aun asi no puedo dejar de pensarte, lo hago? sé que debo.
Otras horas más que pasan y los bíceps se fortalcen, no asi la decisión.
Ya van 6 veces que me hiero el dedo con el cuchillo quizás sea hora de hacer otra cosa.
Claro, es más fácil pensar que crecer.
Pero y si no es para lo que fui hecho? espero sin saber qué es lo que espero.
Como ir a comprar solo por el hecho de saciar la fobia al dinero en mis manos. 
Pasa que me pesan los bolsillos.
Ahora sé que no es cuestión de altura pero, de edad será entonces? o es que el oficio es el hacedor?.
Lo dudo, pero estoy ansioso por ver el instante preciso, quiero poder señarlar y decir ahí está.
Ya sé! sucede por la noche, como los tomates! entonces. En caso de ser asi puede ser que sea tímido o un reventado.
Damián me dijo que uno no lo puede saber, que los demás te lo hacen notar. Pero cómo puede saberlo si el también es uno de los que no lo puede saber?.
Otra duda más madura. Ajj, otra vez me la perdí.